It’s well known
that aristocrats, due to their idle natures, have a penchant for rambling, so
in order to prevent this it is always advisable that the master of the Schloss
be constantly occupied ( whipping the servants for example) . The same thing happens from time to time with
idle bourgeoisies although unfortunately these have to be content with
screaming at someone passing by…
And that’s
precisely what happens when Frau Jenny, daughter of the wise English naturalist
Herr Garton, accompanies her father to one of the best hotels in Funchal,
capital of the island of Madeira so that he may study a specific type of rare
bird ( “Regulus Madeirensis”, more precisely ).
Due to the assertion that this Herr Graf mentioned before, Herr
Professor doesn’t suffer the ramblings intrinsic to bourgeoisies because he is
much occupied with his work, but that’s not the case with Frau Jenny, an idle
and romantic fraulein. She comes to think
that the guard of the mountain range refuge where they are staying resembles
the statue of a faun that they had in their garden in England.
“O Fauno Das
Montanhas” ( The Faun Of The Mountains ) ( 1926) is a medium-length film
directed by Herr Manuel Luís Vieira and is an early and interesting attempt to
portray the fantastic in this Portuguese
silent film production. The weird nature
of the story has possibilities but Herr Vieira often seems more interested the
splendid and beautiful landscapes of Madeira (Of course nature does play an
important part in the picture).
There is a
romantic atmosphere implicit in the film that is the best part of “O Fauno…”;
oneiric images showing nymphs and a faun (all from Frau Jenny’s dreamy mind)
that mesh perfectly and in a mesmerizing way with the Madeira backgrounds
(splendidly photographed). Often these
seem like evocative visions from old book illustrations but then the film comes
down to earth when Frau Jenny’s imaginings take a deranged turn and, influenced
by a nightmare, she shoots the guard thinking he had tried to kill her father.
A very
interesting aspect of the film are some ethnographical scenes which have a
documentary quality in their depiction of the traditional and harsh way of life
of the inhabitants of Madeira in
contrast with Herr Professor’s bourgeois concerns.
It was a shame
that Herr Vieira wouldn’t highlight the more fantastic and romantic aspects of
the story, choosing finally more down to earth aesthetic options and neglecting
in this way the possibilities that a feverish bourgeois mind could have
conjured up from a fertile imagination.
And now, if
you'll allow me, I must temporarily take my leave because this German Count
must celebrate a satyr Convention in Madeira’s deepest forests.
Herr Graf
Ferdinand Von Galitzien
-/-
Es
un asunto bien conocido que los aristócratas, debido a su naturaleza ociosa,
tienen una cierta tendencia al desvarío, por lo tanto y para evitar que esto
acontezca, es siempre más que recomendable que éstos estén ocupados en algún
menester ( fustigando a los sirvientes, por ejemplo… ), una cuestión ésta que
también afecta, aunque en menor medida, a los ociosos burgueses, teniendo que
conformarse éstos con gritar a algún que otro transeúnte…
Y
esto es precisamente lo que le acontece a Frau Jenny, hija del naturalista
inglés Herr Garton, mientras ambos están pasando unas vacaciones alojados en
uno de los mejores hoteles de Funchal, capital de las islas de Madeira.
Estando
interesado Herr Garton en un raro tipo de ave que habita en las islas de
Madeira ( “Regulus Madeirensis”, más exactamente ), decide éste adentrarse,
conjuntamente con soñadora hija,en la sierra del “Rabaçal” y así poder estudiar
de cerca a tan peculiar ave.
Debido
a la cuestión que éste Herr Graf mencionaba más arriba, el Herr Profesor no
sufre de los desvaríos intrínsecos de la clase burguesa al estar éste siempre
ocupado con sus menesteres, algo que no ocurre con su hija, Frau Jenny, una
ociosa y romántica fraulein la cuala muy pronto comenzará a dar síntomas de sus
desvaríos al encontrarle cierto parecido al guardia del refugio de la sierra
con un fauno que tienen instalado en su jardín de Inglaterra.
“O
Fauno Das Montanhas” (1926) es un mediometraje dirigido por Herr Manuel Luís
Vieira, todo un temprana e interesante aproximación al género fantástico en la
producción cinematográfica silente portuguesa.
Debido
a su rara naturaleza, éste filme tan peculiar es ciertamente interesante,
aunque las expectativas solamente se consiguen a medias, sobre todo por no
aprovechar Herr Vieira las posibilidades que ofrecía tan fantasiosa historia,
mostrándose más interesado en fotografiar los espléndidos y bellos paisajes de
Madeira, aunque también es cierto que dicha cuestión tiene considerable
importancia en relación con la trama del filme.
Y
es que hay una romántica atmósfera implícita en el filme, la cual es
ciertamente la mejor parte del mismo, imágenes oníricas en donde un fauno y sus
ninfas emergen de la soñadora mente de Frau Jenny entre los fascinantes parajes
de Madeira ( fotografiados con mucho mimo por Herr Vieira, tal y cómo
anteriormente ha mencionado éste Herr Graf ), románticas y evocadoras visiones,
que recuerdan a viejas ilustraciones bibliográficas, para luego dar un giro el
filme mucho más realista, aunque circunscrito en el terreno fantástico, en
donde la calenturienta mente de Frau Jenny, influenciada ésta por una
pesadilla, dispara contra el guarda al creerse que éste ha intentado matar a su
padre.
Otro
interesante aspecto del filme son ciertas escenas con interés etnográfico, una
especie de documental encubierto en donde se muestra la idiosincrasia de los
habitantes de Madeira ( de nuevo la naturaleza como personaje fundamental en el
filme ), una vida dura y tradicional en contraste con la burguesa existencia
del Herr Profesor y su hija.
Cómo
éste Herr Graf ha mencionado con anterioridad, es una lástima que Herr Vieira
no resaltase los aspectos más fantásticos y románticos del filme, optando
finalmente por una historia mucho más realista, unas opciones estéticas éstas
últimas que merman las posibilidades que podría haber ofrecido para el filme
una mente calenturienta burguesa debido a su fértil imaginación.
Y
ahora si me lo permiten, les tengo que dejar momentáneamente, pues este conde
germánico tiene que celebrar una convención de sátiros en las profundas
florestas de Madeira.
Herr
Graf Ferdinand Von Galitzien