From his early silent works, the great Russian film director, Herr Yakov Protazanov, made literary adaptations from equally great Russian writers, as is the case with “Chiny I Lyudi” ( Ranks And People ) (1929) in which three short stories by Chekhov, “Anna On The Neck”, “Death Of A Petty Official” and “Chameleon” were assembled for the silent screen.
“Anna On The Neck” tells the story the young and beautiful Anna ( Dame Mariya Strelkova ) who has just married an old but rich civil servant. Anna thinks her marriage will rescue her father and her two brothers from a miserable life of poverty. Anna becomes disenchanted fast when her rich husband turns out to be an avaricious and severe man. Anna’s sad life changes when she attends a posh ball and every man there, including the mayor, is charmed by her. Anna’s husband hopes to get business advantages through this but Anna is thinking of revenge.
The second episode, “Death Of A Petty Official” depicts the story of Herr Cherviakov ( Herr Ivan Moskvin ) who together with his wife attends a ballet; during the performance, the civil servant sneezes on a functionary of high rank and offers apology after apology all during and at the end of the spectacle. The general pays no mind to the incident but is harassed by this minor official who won't let the matter drop and, time after time, keeps on apologizing, writing letters asking for forgiveness or visiting the functionary at home.
In the third film episode,” Chameleon”, a small dog bites the finger of a passer-by. The furious man seizes it and asks two policemen to charge the owner of the dog. Both agents begin to draft the report but a change of attitude occurs at once when a man comes to tell them that this dog belongs to the mayor.
In the year 1929, to construct a film made of different episodes was an exciting idea and the successful final result ( very fanciful in this kind of film ) depends basically on the film structure. Although it's not really necessary for the different stories to be interconnected, this German count feels it's very advisable artistically to have a theme-even a minor one- linking the episodes within the film.
Like a “matryoshka” doll ( those Russian set of dolls of decreasing sizes placed one inside another ), in “Chiny I Lyudi”, little by little Herr Protazanov goes deeply into the complicated relationships between high or low ranks, or the everlasting and subtle fighting among different social classes. He studies in depth and with sobriety and skill, troublesome and basic human instincts and behaviours such as hypocrisy, fearfulness or forgiveness, (no need this time to be strictly and obviously incisive in such criticism). This is a solid oeuvre with complementary and enlightened meanings that will linger in the minds of the viewers long after the silent show has ended.
And now, if you'll allow me, I must temporarily take my leave because this German Count must close ranks with his fellow aristocrats.
Herr Graf Ferdinand Von Galitzien
-/-
Ya desde sus primeras obras silentes, el gran director ruso Herr Yakov Protazanov, adaptó para la pantalla silente obras literarias de, igualmente, grandes directores rusos, como acontece con el filme “Chiny I Lyudi” (1929), basado éste en tres relatos cortos de Herr Chejov, más especificamente, “Ana Al Cuello”, “Muerte De Un Funcionario” y “El Camaleón”.
“Ana Al Cuello” narra la historia de la joven y bella Anna ( Dame Mariya Strelkova ), casada recientemente con un rico y viejo hacendado; Anna cree que su matrimonio salvará a su padre y sus hermanos de la vida de pobreza que llevan, pero muy pronto Anna se dará cuenta de que su rico marido es un hombre rígido y avaricioso; desencantada, la triste vida de Anna cambiará cuando acude a un elegante baile en el cual todos los hombres allí reunidos quedarán fascinados por su belleza, incluyendo al alcalde, un hecho éste que el marido de Anna cree que le favorecerá para conseguir ventajas en sus negocios, todo lo contrario de lo que piensa Anna: venganza.
El segundo episodio del filme, “Muerte De Un Funcionario”, cuenta la historia de Herr Cherviakov ( Herr Ivan Moskvin ) el cual acude con su mujer a un espectáculo de ballet; durante dicha representación, dicho funcionario estornudará de forma accidental en el cuello de un alto funcionario, excusándose ante él por dicho hecho, una y otra vez hasta que el espectáculo finaliza.
El alto funcionario no da importancia al incidente pero es continuamente molestado por Herr Cherviakov, incapaz de olvidar dicho incidente, continuando con sus disculpas de forma continua, sea escribiéndole cartas solicitando su perdón o visitándole en su domicilio particular.
En el tercer episodio, “El Camaleón”, un perro muerde el dedo de un transeúnte; dicha persona, iracunda, agarra el perro solicitando a dos policías que averigüen a quién pertenece el can; ambos agentes inician una investigación pero cambian de opinión cuando un vecino les cuenta que dicho perro pertenece al alcalde.
Construir en el año silente de 1929, un filme elaborado de episodios independientes entre sí, era una idea novedosa a la cual su exitoso resultado final ( muy caprichoso en esta clase de obras ) se debe sobretodo a su estructura narrativa.
En estos filmes de episodios, no es necesario que exista una conexión directa entre los mismos, aunque este conde germánico cree oportuno, en términos artísticos, que exista por lo menos una mínima relación o conexión entre los diferentes segmentos de dichas obras.
Como una matrioska ( esas muñecas rusas que van encajando unas en otras ), en “Chiny I Lyudi”, Herr Protazanov, poco a poco, se va sumergiendo en las complicadas relaciones entre diferentes rangos y estamentos sociales, o la eterna y sutil lucha interclasista, estudiando además y en profundidad, de forma sobria y certera, problemáticos comportamientos o instintos humanos tales como la hipocresía, el miedo y el perdón, sin necesidad de ser demasiado severo u obvio en dichos planteamientos, consiguiendo así, una obra muy sólida con complementarias y lúcidas reflexiones sociales que permanecen en las mentes del espectador una vez que la sesión silente ha finalizado.
Y ahora si me lo permiten, les tengo que dejar momentáneamente, pues este conde germánico tiene que cerrar filas con sus camaradas aristócratas.
Herr Graf Ferdinand Von Galitzien